Bedda Madre, un viaje a la auténtica cocina siciliana

El restaurante, ubicado en Castelldefels, esla segunda parada del periplo por la gastronomía italiana que propone el grupo Dolcevita Gusto Italiano, una auténtica oda al
producto y a la cocina local que no quiere dejar a nadie indiferente: “Bedda Màtri!”

Mesa del Restaurante Siciliano Bedda Madre en CasteldefelsEl Grupo Dolcevita Gusto Italiano -con Emmanuele Stevanato al frente- lo ha vuelto a hacer. Después de trasladarnos a la Nápoles más viva y arrebatadora con Número Diez (Capitán Arenas, 62, Barcelona), ahora nos invita a cruzar el Mediterráneo para llegar a la isla donde su exuberante cocina es una forma de vida, es la “cucina della mamma siciliana”. Su nombre: Bedda Madre (Av. Constitución, 89, Castelldefels).

En este flamante restaurante —inaugurado el 13 de noviembre— la gastronomía de Sicilia habla en voz alta, con esa mezcla de orgullo, exageración y proximidad que define a la isla. Es una cocina generosa, rotunda y con carácter, y un local que nos transporta a la isla a
través de un lenguaje visual disruptivo y lleno de contrastes, con algunas obras únicas, creadas por artistas emergentes.

Pero Bedda Madre es, ante todo, una oda a la esencia de una tradición milenaria, donde el
mejor secreto no está solo en unas recetas mestizas que llevan siglos viajando entre culturas —la fusión no es tendencia en Sicilia: es su ADN ancestral—, sino también en la calidad casi sagrada de su producto.

Una materia prima que viaja desde la isla hasta la cocina de Bedda Madre. Quesos y embutidos sicilianos, pistacho de Bronte, ricotta fresca, almendras… y que el chef siciliano Gaspare Citarrella transforma inspirándose en ese recetario rico y milenario que se mueve entre lo árabe, lo griego, lo español, lo italiano… Porque la cocina de Sicilia, y la de Bedda Madre, es, por definición, fusión antes de que existiera la palabra fusión.

“Un siciliano no te dice te amo, te cocina”

Un cartel luminoso de la sala de Bedda Madre lo advierte: “Un siciliano no te dice te amo, te cocina”. Y el chef de la casa lo hace al más puro estilo de su tierra natal. El comensal debe saber que “su dieta va a sufrir” (tal y como irónicamente se presenta la carta), porque en Bedda Madre, “se empieza poco a poco -tal vez-” (entrantes), luego “la cosa se pone seria” (primeros), para catar la “reina de la mesa” (pizzas) y comprobar que “el paraíso existe” (postres).

Así, hay entrantes absolutamente de locura, como el favorito de Emmanuele, los “Mangia e Bevi” (una cebolleta envuelta en panceta), que ha rescatado de los mercados de Palermo y que conecta la tradición siciliana con el calçot catalán. Destacan también, los arancini rellenos a mano (100% street food siciliano); o las bravas sicilianas, las “cazzilli palermitani”, una enorme patata frita con salsa de ajo y pesto de pistacho.

La “cosa se pone seria” con el plato estrella de la coquinaria siciliana, reflejo fidedigno de su mezcolanza de culturas: el cuscús de pescado real. También se pueden saborear platos tan caseros como los “anelletti» al horno rellenos de ragú de carne, mozzarella, guisantes y queso caciocavallo; o los canelones con crema de brócoli, queso caciocavallo y miga de pan salteada; o los spaguetti al fuego, con ese picante que le da tanto carácter (para llorar de felicidad).

Más de una docena de pizzas aspiran a ser las “reinas” de la mesa, para preceder a las puertas del paraíso del dulce. Porque Sicilia es para los golosos un auténtico edén, y Bedda Madre una muy buena sucursal… (o no). Aunque más que entrar al paraíso, lo que se propone es pecar con postres como el Biancomangiare, el bocado dulce más tradicional de Sicilia; o el icónico cannolo siciliano relleno de ricotta fresca dulce; o la delicada cassata siciliana en copa.

Platos, sugerencias y bebidas (también 100% italianas) que recomienda, sugiere y sirve con maestría el director del establecimiento, Gianluigi Federici.

Una oda a la memoria

“Desde que llegué a Barcelona tenía en mente abrir un local dedicado a Sicilia, a sus sabores, aromas y colores, de los que soy un amante indiscutible. Quería seguir con la filosofía del grupo de brindar aquí la cocina más auténtica, la de ‘la mamma’, pero también la cocina de las calles, la de los carritos tan típicamente sicilianos”, subraya Emmanuele Stevanato, creador e impulsor del Grupo Dolcevita Gusto Italiano.

Por eso, Bedda Madre no es solo un restaurante, es un espacio que despierta la memoria, el afecto y un profundo sentido de pertenencia. Un restaurante que es “cocina de casa, exagerada, sabrosa y cercana; la cocina de aquellas madres que te dicen: ‘come, bambino’.” Un tributo, de hecho, a la madre de su creador, porque “todo lo que hago nace de mi propia experiencia, del recuerdo de comer en la mesa de mi madre”, confiesa Emmanuele.

Un paso adelante: la madurez del Grupo Dolce Vita

Con Bedda Madre, el Grupo Dolcevita Gusto Italiano da un salto a la madurez. “Fuimos jóvenes con las trattorias y pizzerías; con Bedda Madre damos un paso adulto, más profesional, más gastronómico. Queremos enaltecer la cocina desde la estabilidad y desde la madurez”, resume Stevanato. 

Y es que, el nuevo local propone una propuesta gastronómica más cuidada, donde se respeta el producto —elegido directamente por Emmanuele de proveedores de la isla— y se eleva mediante elaboraciones que muestran la tradición y también la evolución natural de la cocina de la isla. 

Así, Bedda Madre pone sobre la mesa la Sicilia callejera, la de los mercados, la del colorido y el ruido estridente, pero también la cocina cálida, exagerada y abundante de las casas. Ese equilibrio se refleja en la decoración: un espacio que se abre como un callejón cuidado y desemboca en un patio tradicional. 

Un universo donde conviven símbolos sacros y profanos —un guiño al sur más profundo— y donde un mural del artista Daniel Pintos, habitual colaborador del Grupo, aporta la estética irreverente y auto irónica que caracteriza a toda la imagen del Grupo Dolcevita (nota: incluso en las paredes de los lavabos se cuela el arte contemporáneo de la mano del ilustrador Raffaele Villarusso). 

Y en esta ocasión, no son los típicos limones los que dan la bienvenida al comensal, sino atrapasueños, porque, tal como explica el propio Emmanuele: “Queremos que al entrar la gente deje atrás los malos pensamientos y viva una experiencia gastronómica y cultural 100% siciliana”. 

 Sobre Grupo Dolcevita Gusto Italiano

Grupo Dolcevita Gusto Italiano es un proyecto gastronómico fundado por Emmanuele Stevanato, que invita a viajar por Italia a través de restaurantes con alma, autenticidad y carácter regional. Como en un parque de atracciones en donde cada atracción es una emoción, en Grupo Dolcevita cada restaurante es una experiencia. 

Este 2025, tras el éxito de Número Diez —un viaje a Nápoles de los años 80—, y la apertura de Bedda Madre, el Grupo Dolcevita continuará su ruta culinaria con propuestas que reproducen fielmente la esencia de cada región italiana.  ¿Próxima parada…? Andorra. 

Nota: El nombre Bedda Madre no es casual. En Sicilia, Bedda Matri es una exclamación popular que significa “¡Madre mía!”. Una mezcla de sorpresa, cariño y exageración. Esto es lo que Emmanuele quiere que cada comensal se lleve tras pasar por su restaurante. “Espero que nuestros clientes se vayan del local sintiendo que, por fin, han encontrado un pedacito de la Sicilia más auténtica, un lugar en el que pueden confiar no solo por la comida, sino por el servicio, por el cuidado, por toda la experiencia”.

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martes, diciembre 9, 2025

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